Orden de la Luz

Un enorme castillo, donde se preparan y instrullen para formar nuevos caballeros para luchar contra las tinieblas










[subiré foto]

Nathaniel Sejii, legítimo heredero de Vaníssar y rey de los hibridos entró por la puerta. Los otros miembros de la oscuridad sonrieron al verle, más seguros en su compañia.

Por lo contrario, los de la luz, clavaron sus puras miradas en él, serios.

Nate se sentó en una punta de la mesa y se cruzó de brazos

Victoria Graciel, reina de los ángeles, entró por la puerta, con su caminar seguro, se paro a un metro de la puerta y desplego sus alas –Bien, podemos empezar- Dijo con voz firme, se acerco a una de las grandes sillas y se sentó, esperando con paciencia a que todos tomaran asiento.

Nate apoyó los pies en la mesa y sonrió mirandola. Pero era una sonrisa malvada y burlona, no la adorable y enamorada.

- empezemos

Dijo con su voz varonil de ligón

[sentado así :]

Vic lo miro con dureza –Bien, estamos aquí porque la Gran Batalla esta cerca, creo que hablo por todos los representantes de los pueblos del Reino de la Luz, cuando digo que nos gustaría firmar un acuerdo una tregua, sabemos que no podemos existir sin vosotros, por lo tanto firmemos un acuerdo de respeto y olvidémonos de La batalla.- Vic habló con fuerza, mirando a cada uno de los presentes.

Nate carraspeó negando con la cabeza

- va contra nuestra naturaleza el dejar de luchar.

Dijo alzándose y empezando a andar por detrás de las sillas de los presentes, captando su atención. Tenía la cola rigida y las orejas levemente tensas. Sonrió dejando ver sus sexys colmillitos caninos y añadió

- creo que nos equivocamos si creemos de verdad que TODOS y cada uno de los miembros de la luz, están de acuerdo en convivir con nosotros.

Respiró hondo y prosiguió

- esta batalla viene de atrás, vuestros antepasados eliminaron a muchos de los nuestros.

Vic le interrumpió -¡Y anteriormente los vuestros mataron a muchos de nosotros! ¡Esta claro que es ley de vida¡ ¡Pero nadie quiere morir! Apuesto a que nadie en esta sala tiene deseos de morir, y lo único que hacemos ¡Es planear nuestra muerte! Si acordamos una tregua, podemos existir, unos con otros si morir.-Vic parecía enfadada aunque sabia que todo esto era un juego, sabia que ambos deseaban lo mimo y esto era un simple teatro.

Nathaniel negó llevandose las manos a la espalda. Parpadeó lentamente y miró a cada uno de los miembros de la sala con su mirada fria pero hipnotica. Se paró en cada una de las chicas de la sala y les sonrió sensualmente

- luchar por vivir es más emocionante.. no creáis a la reina de los angeles. No sabe lo que es ver como estás con alguien a quien deseas matar pero no ppuedes. Esa tregua acabará con nosotros. Alguien.. tú.. o tú..

Fue señalando a los miembros

- uno de vosotros romperá la tregua. La profecía lo dice claramente, la guerra se hallará.

-¡Pero podemos aplazarla! ¡La profecía se puede romper! ¡No os dejéis engañar por este mal nacido! No tienes ni idea de lo que hablas, hablamos de miles y miles de vidas en juego, yo misma, tendría que liderar el ejército de la luz, y no estoy dispuesta a dar la vida de alguien que ni siquiera a nacido por hacer realidad una estúpida profecía-Vic empezaba a chillar, miro a Nate a los ojos, mientras se acariciaba el vientre –Por favor, compañeros de la luz, escuchar mis palabras, entenderme, hablamos de niños inocentes, de ancianos, de mujeres y hombres, no os dejéis engañar por este hombre que se acuesta con toda mujer, y al final les desgarra el corazón, este hombre estuvo a punto de convertirme en un ángel caído, y eso es algo que ni en el reino de la oscuridad esta bien visto. Por favor hermanos, escucharme, yo no e planeado esto para destruiros solo para convivir en armonía, y aunque os empeñéis en que no, si que se puede!-Vic los miro a todos con sus profundos ojos ahora de color violeta claro –Por favor-susurro, agachó la mirada y se sentó.

Nathaniel parpadeó lentamente, la miró fijamente y tomó asiento serio.
Los demás lo miraron con miradas recriminatorias al oir lo que le hizo a la reina de los angeles.
Frunció el ceño y susurró con palabras siseantes

- yo he nacido para luchar. Y el que no quiera seguirme, que no lo haga. Odiadme...

Se rió con una sonrisa macabra y clavó sus ojos grisáceos sensuales en los presentes

- odiadme y luchad contra mi, los que os atreváis.

Sacó su espada y la clavó en la mesa con fuerza.

Vic levantó la mirada –No vamos a luchar, el reino de la luz no luchara-dijo con voz potente zanjando este tema –No permitiré que muera nadie, y si es lo que deseas, yo misma luchare contra vos, pero tendrá que esperar esa batalla.-Dijo mirándole.

Nate que no esperaba esa respuesta se quedó serio, mirando como su espada aún vibraba en la mesa.
Se hizo un silencio sepulcral. Nathaniel se puso en pie y miró a los presentes

- el reino de la oscuridad no lucha contra mujeres. Aún somos unos caballeros.

Dijo recordando su titulación como caballero de Nurgon.

-Te recuerdo que yo soy un ángel guerrera y que la mitad del ejército del reino de la luz son mujeres, asique, me lo tomare como que aceptáis la tregua-Vic dijo eso, se levantó y se fue aun con las alas extendidas.

Nate se dejó caer en el asiento muy serio. Los demás de la oscuridad no se atrevieron a decir nada, pues conocían de sobra a Nathaniel de Vanissar y querian mantener la cabeza pegada al cuerpo.

La sala se fué vaciando. Los de la oscuridad refunfuñando cosas en susurros y los de la luz con sonrisas victoriosas.

Vic se escondio entre las sombras hasta que todos los miembros de la orden se habian ido, cuando vio al ultimo salir, se apresuro a entrar en la sala y cerrar la puerta a su espalda -¿A que actuo bien?-Dijo vic sonriendo.

Nate no alzó la mirada hasta al rato. La miró y asintió con aspecto tranquilo. Desclavó la espada de la mesa y se la guardó

-¿Que pasa nate?-preguntó vic preocupada

Nate negó con la cabeza y la miró sin prisa

- me he fijado en como me miraban todos

Dijo pensativo, mirando las sillas vacías

-¿Y? ¿Qué pasa?-Preguntó con prisa, preocupada por si la habia fastidado.

- Las mujeres me desean.. sienten curiosidad por mi.. aunque saben que les haria daño. Y los hombres.. muchos me temen.. unos de odian pero no se atreven a revolucionarse contra mi.. y los demás estan aterrorizados solo de oirle o de ver que les miro.

Susurró mirando los asientos, recordando las expresiones

- dime que tipo de persona he sido hasta ayer

La chica agacho la mirada -Nate...-Dijo mirandole confusa -Fuiste lo que te enseñaron a ser, no hay mas-añadio en un susurro.

- soy un monstruo.. mujeriego y tirano. Soy lo que más odio..

Se miró las manos aterrorizado

-Conmigo no eres asi, ni con Cloe lo seras...-Dijo vic intentando calmarle, se acerco a el y le rodeo con sus brazos -No eres un mounstro-le susurro al oido.

- Pero lo he sido durante demasiado tiempo.. ¿como pretendo ser rey si nadie me apoya?.. mis aliados me temen victoria!

Dijo alarmado

-Yo... nose...-dijo vic mirando hacia otro lado -No se como te sientes-susurró-Yo nunca e pasado por eso-